Leer: Deuteronomio 7:26
Una de las experiencias que más ha marcado mi vida espiritual fue cuando oí una predica referente a este tema , y sentí que debía limpiar mi casa, en oración. Le pedí al Espíritu Santo que me revelará que cosas había que le desagradaban y él empezó a mostrarme objetos que debian salir y el ambiente de mi hogar cambió.
Te comparto una pequeña guía que use:
Camina por tu casa y orando pide al Señor protección por este proyecto, píde que te muestre libros, revistas, juguetes, joyas, recuerdos música, CD, vídeos o cualquier cosa que le sea poco grata a Él. Pregunta a tus hijos que te muestren cualquier juguete que los hace sentir incómodos, y explíqueles por qué lo estás haciendo.
Es muy importante que examines souvenirs que hayas traído a su casa. Si son caricaturas de dioses de otras naciones (Por ejemplo: budas, tisis, dioses y diosas, máscaras de muerte, máscaras de demonios) deshágase de ellas.
Quita todos los objetos que has decidido tirar , rompe todos los objetos de cerámica y los objetos irrompibles tírelos a la basura, no los regale a nadie para evitar pasarles estos problemas a otros. Dios dice que nos deshagamos de estas cosas.
En oración consagra tu casa al Señor, dile que ahora es una embajada de su Reino aquí en la tierra, donde solo gobierna El .Vigila lo que traes a casa, conoce, cuál es su contenido y cómo puede afectar a tu familia.
Mantén tu casa limpia y en orden: Desorden y suciedad en su casa traen confusión y pereza. Un hogar cristiano debe estar limpio y en orden, reflejando que vivimos conforme a lo que creemos.
Por lo tanto, no lleven a su casa nada que sea despreciable, para que ustedes no sean también destruidos. Eso está destinado a la destrucción, así que deben considerarlo como algo despreciable.
