En el Camino de la vida seremos procesados y nos encontraremos en muchos momentos donde el enemigo a veces nos ataca con armas fuertes y otras sutiles y no comprendemos que lo único que quiere es desviarnos de que confiemos en el Señor y tengamos fe.
Hoy Dios nos recuerda una promesa, si nos mantenemos en sus manos, NINGUNA ARMA FORJADA CONTRA NOSOTROS PROSPERARÁ. ( ISAIAS 54:17 )
Cuando dice “ninguna”, es ninguna. Entonces te invito a refugiarte en Dios, y no permitas que “ningún arma” del enemigo te separe de Cristo.
Hay que prender de los procesos, pero tú eres más fuerte que cualquier arma si Dios está dentro de ti.
"Porque mas poderoso es el que está en mí , que el que está en el mundo".